Con el fin de combatir la piratería de libros, Uruguay abrirá una librería digital de textos universitarios tras el cierre de varios locales que vendían copias sin autorización y con un precio menor al del original.
La propuesta nace después de que en octubre de 2013 fueran clausurados varios locales de una galería comercial próxima a la facultad de Derecho de la Universidad de la República (Udelar), en donde, ilegalmente se vendían libros fotocopiados con el conocimiento y el apoyo tácito de numerosos docentes y estudiantes perjudicando a los autores y sus derechos.
Así, fueron allanados 15 establecimientos, 32 personas detenidas y la incautación de 80 maquinas focotopiadoras junto con centenares de libros tanto originales como copias.
Finalmente, la Justicia procesó sin prisión a los 14 dueños de estos establecimientos por delitos contra la propiedad intelectual.
Este procedimiento se llevo a cabo despojes de una denuncia realizada por la editorial de textos jurídicos Fundación Cultura Universitaria (FUC), institución vinculada a los estudiantes de Derecho de la universidad pública uruguaya, y cuyos textos serán ahora los primeros en estar disponibles en esta librería digital.
La librería tiene como fin «resolver un problema con dos puntas: el derecho de acceso de los estudiantes a los textos obligatorios para sus estudios, y los derechos de los autores, editores y diseñadores que son los creadores de los libros», señaló Reboledo, director del Centro de Información Oficial del gobierno uruguayo (IMPO).
A partir del 10 de marzo, en la página Web del IMPO estarán disponibles hasta 30 títulos relacionados con las carreras de Derecho y Notariado que se cursan en la Udelar.
El objetivo es que, antes de finalizar el primer semestre del curso esté digitalizado el 100 % de los textos para estas carreras, y que se vaya extendiendo este modelo al resto de titulaciones de la Udelar.
La diferencia de precio entre el libro en formato impreso y el electrónico será «notable», y se estima que cada página del texto digital tendrá un costo de unos 70 centésimos de peso uruguayo «para ser competitiva con el precio de las fotocopias», según indicó Reboledo.